Copérnico destronó al ser humano como centro del Universo y ese sólo fue el primer paso de una serie de descubrimientos científicos que nos alejaban definitivamente del puesto de privilegio que la humanidad suponía como inmutable. Con la teoría del Big Bang y la datación de la edad de la Tierra, del Sol y del Universo en su conjunto, parecía que ya estaba todo dicho: somos una minúscula mota de polvo en el espacio y el tiempo. Pero, como muestra Brian Green en este libro, todavía es posible dar un paso más allá: ¿Y si todo lo que nos rodea, todo lo que podemos ver, es realmente una minúscula parte de una infinidad de otros universos?

Basándose en las teorías físicas de los dos últimos siglos, el autor navega por las posibilidades que subyacen en los entresijos de dichas propuestas teóricas. Así, enumera 9 posibles multiversos; algunos de ellos son totalmente incomprobables en la práctica, y otros podrían serlo de manera indirecta. Estos son los multiversos que propone:

Multiverso mosaico: Si nuestro universo es infinito en espacio y tiempo, necesariamente se darán las mismas condiciones que tenemos en nuestro horizonte visual en infinitas partes de esa infinitud (habrá infinitas Tierras iguales que la nuestra, infinitas Tierras en las que no ha nacido Hitler, infinitas Tierras en las que el ser humano no ha llegado a existir, infinitas Tierras en las que el Partido Popular gana por mayoría absoluta las elecciones andaluzas del 2012 y la prima de riesgo española baja por debajo de los 300 puntos, etc… las posibilidades son infinitas)

Multiverso inflacionario: Se basa en el concepto de Inflación que explica el rápido crecimiento del Universo después del Big Bang. Es posible (físicamente viable) que esa inflación siempre esté ocurriendo y constantemente aparezcan nuevas burbujas inflacionarias que crearían universos, aunque no todos tienen por que tener las mismas leyes físicas que el nuestro. Nuestro universo sería uno más de esos “universos burbuja”.

Multiverso brana: Desde la teoría de cuerdas, o teoría-M, nuestro universo sería una “brana” tridimensional más flotando en un espacio de dimensiones más altas poblada por otras “branas” similares a la nuestra.

Multiverso cíclico: Un multiverso en el tiempo; dos de las anteriores branas chocan cíclicamente, provocando un big bang cada vez que las condiciones son apropiadas. Cuando un universo se “diluye”, vuelven a chocar y a comenzar el ciclo.

Multiverso paisaje: Partiendo de la base de que, según la teoría de cuerdas, el espacio es decadimensional, con 6 dimensiones diminutas enrrolladas en sí mismas, existen unas 10 elevado a 500 posibles maneras de compactarlas, y suponiendo cierto el campo inflatón (que hace posible el universo inflacionario), existiría la posibilidad de múltiples universos cada uno con sus 6 dimensiones extras enrrolladas de manera distinta.

Multiverso cuántico: El más querido por los escritores de ciencia-ficción. El gato de Schrödinger hecho realidad. Esta interpretación de la mecánica cuántica rechaza el colapso de la onda de probabilidad cuántica. Si la onda de probabilidad nos dice que un electrón concreto tiene 99% de probabilidad de estar en Madrid y un 1% de estar en Toledo, cuando finalmente lo observamos y resulta que está en Madrid, no quiere decir que ya no es posible que esté en Toledo: existe un universo en el que está en Toledo, y un científico de ese universo lo verá en Toledo, pero sabrá que existen numerosos universos en los que se encontrará en Madrid. Esta variedad implica infinitos universos.

Multiverso holográfico: El más extraño de todos. Nuestra realidad es un reflejo de otro universo “frontera” (como si ese universo fuera la superficie de una esfera y el nuestro lo que hay dentro; todo lo que sucede en esa superficie, se refleja o manifiesta en el interior). Proviene de datos experimentales que implican a la teoría de cuerdas y la física cuántica.

Multiverso simulado: Resumiendo: Matrix. Debido a los avances tecnológicos de cualquier sociedad, podría darse el caso de que sus miembros decidan recrear universos completos por computadora.

Multiverso final: Todo es posible, todas las formulaciones matemáticas y físicas son posibles. Partiendo de este principio, todo universo que pueda ser descrito, matemática y físicamente, existe. Incomprobable. En este caso es cuestión de fé.

 

Es abrumador pensar en las posibilidades que brinda la física teórica, pero no deja de ser curioso que en todos los casos, las ecuaciones de diferentes teorías físicas permiten interpretaciones que llevan a uno u otro multiverso. Muy recomendable este libro y edificante reflexionar sobre lo que propone el autor.

Para terminar, un video hecho por Cyriak, la única persona que ha viajado a las 6 dimensiones extra y ha sobrevivido para contarlo:

True Loves, Hooray For Earth